25 septiembre, 2007

Severa vigilancia / François Bucher

Normalmente aborrezco las obras de arte colombianas que se valen de los principales problemas de nuestro país, a saber, la violencia, el narcotráfico y la política, para llamar la atención de expertos de oídos sordos, ojos ciegos y bocas mudas. Siento que son fórmulas sin poesía que lo único que logran es estigmatizar y catalogar erróneamente nuestra producción a los ojos del orden artístico internacional. Esto, en vez de estar generando propuestas de carácter universal y anacrónico que tengan en cuenta, la que para mí, es la base de las Artes Visuales, la seducción estética.



Sin embargo, el montaje presentado por François Bucher titulado “Severa Vigilancia” cumple los requisitos para ser una obra de arte sólida y coherente. Lo digo porque el espacio escogido por la Galería Al Cuadrado corresponde conceptualmente con el interés del artista además de que el testimonio de la decadente mafia paisa de los años 80’s está muy bien documentado. Fotos en gran formato pegadas a la perfección e impresas impecablemente hacen del recorrido una delicada narración. La puesta en escena de un carrusel de imágenes muy bien compuestas y de un video extremadamente largo pero con mucho ritmo, resuelven de manera lógica la intención periodística de la obra. Todo completado por un texto muy puntual y bien redactado por Lucas Ospina, el cual situa al espectador y le permite diversas lecturas entorno a los hechos.



En cuanto al plato fuerte de la noche me parece que lo dieron dos cosas: la presencia de varios pesos pesados del mundo arte (José Rocca y José Alejandro Restrepo) al lado de la crema y nata de la sociedad bogotana y la capacidad del equipo técnico de la galería, que siempre logra crear la infraestructura necesaria para que estas muestras itinerantes se sigan dando. En resumen… una noche interesante.

16 septiembre, 2007

Extra No. 9: Museo de Arte U.N.

Amo sentir nostalgia y melancolía. Por eso hace unas semanas decidí visitar el museo de arte de la Universidad Nacional y revivir tiempos pasados y fantasmas creativos.



Aquel día, además tuve la suerte de ver allí obra de José Antonio Suárez. Unos especiales dibujos vieja escuela, sacados de sus inseparables cuadernos de boceto.
Para los interesados, 52 pequeñas obras de su autoría se exponen ahora en la Galería Alonso Garcés.




Próximamente…
Esperen el Top 10 del III Salón de Arte Joven del club El Nogal y mis comentarios acerca de la polémica descalificación de la Galería Arte consultores en la Feria Artbo 2007.


A bientôt,
Lolita

12 septiembre, 2007

Equus arte



En esta ocasión, por sensata prudencia y como para evitar una fatal paráfrasis decidí en vez de extenderme en comentarios pesimistas, transcribir ciertos apartes de la columna escrita por Antonio Caballero para la revista ARCADIA del mes de Agosto. Y cito: “Son horrendos. Todos son horrendos: los de artistas consagrados y los de aficionados domingueros entusiastas”. “Los conocí cuando pasaba por el Parque de la 93. Me estremecí. No fui capaz de hacer la ronda completa, así que no los vi todos. Pero vi los suficientes para poder asegurar que todos son horrendos”. “Hablo de esos caballos de yeso o de poliestireno o de papier maché o de fibra de vidrio o de lo que sea”. “Hablo de esos caballos pintarrajeados de dorado o de verde, enjaezados de flores como de mazapán, adornados con bombillos eléctricos que parpadean, cortados en rodajas, estirados como jirafas de plastilina, pintados de amarillo, azul y rojo como el tricolor patrio, que últimamente han traído a decorar las calles de bogotá”. “Informa la prensa que una vez concluida la exhibición en plazas y parques los caballos serán subastados. ¿A quién le va a tocar comprarlos?”.1

Frases perfectas para hablar de un proyecto que aunque pretende embellecer la ciudad la está afeando inconscientemente. A futuro los organizadores tendrán que tener en cuenta que al plantear una exposición itinerante por una ciudad, el tema o pretexto debe coincidir con el hecho de que es una urbe, una capital, una metrópolis. Con esto quiero decir que es necesario que la curaduría se preocupe por la mimesis entre la obra de arte y –repito, en mayúsculas para que se entienda- LA CIUDAD. He ahí la clave para que dichos proyectos funcionen. ¿Qué hubiera pasado si las mariposas en metal no hubieran sido gigantes sino al contrario diminutas (tamaño real) y estuvieran por ahí colgadas, cual móviles de Kalder en parques y plazas públicas? ¿Qué pasaría si en vez de caballos hubieran hecho perros callejeros o pájaros carpinteros? ¿Qué pasa si los artistas intervienen señales de tránsito, avisos publicitarios, pasos peatonales? Enfin…

Todos los caballos los encuentran en la página de Fundación Corazón Verde.


1
CABALLERO Antonio. Los caballos de Atila. Revista Arcadia No. 23. Agosto 2007.

02 septiembre, 2007

Nota 12: Entrevista para Terra Magazine Latinoamerica

"El arte de Bogotá contado por Lolita Franco"



Hace un par de semanas fui contactada vía e-mail por una joven comunicadora que decía interesarse en mi espacio. Y así era. Con un gran apetito investigativo y periodístico Erika Martínez me fue haciendo una serie de preguntas puntuales cuyas respuestas se habían venido gestando a lo largo de los 10 meses que lleva abierto el blog. Aunque la nota es un resumen de todo lo que se habló, es un primer indicio de que mi propósito por hacer crítica narrativa y cultural está teniendo un cierto impacto.

Remítanse a la siguiente página para leer el artículo:

http://www.us.terra.com/terramagazine/interna/0,,OI1864685-EI8879,00.html